lunes, 2 de junio de 2008

Varios poemas de Martín Bracamonte Rivas

POEMA DE LAS PUERTAS (2005)
(Musicalizado por Saint Speedyto Rock & Gadjiberibimmbas & Buster Keaton Ensamble)

Camino paralelo a las puertas.
Y se cortó las venas
y recordó toda la historia de la evolución
en un lugar renacido.

Camino paralelo a las puertas.
Veo las estaciones de la tierra y del sol,
y quiero irme de acá,
siempre descendiendo,
en el cañón de un fusil
a las regiones ignotas
que ningún ser humano
ha pisado jamás.
Camino paralelo a las puertas.
Junto a mí, un angel momificado
y un niño sin voz
me piden a gritos realidad
y pan.

¿Cómo quieren que viva acá?
si quiero caer y morir
a un costado del camino,
que corre paralelo a las puertas
y que es el filo
de la navaja.

EPITAFIO DE PAN (2005)

Todo era hermoso en la esfera de agua,
en la casa que de mí se guardaba.
Develadas las tinieblas de la madrugada,
ya no hay otro camino
ni es ésta la casa.

Y entré en la casa de la luna quebrada,
del sol de oro,de la nieve falsa
y de la inocencia.
Desde mi ventana veía
el conjunto de las ciudades.

MÁRTIR (2008)

Brillaron los cuerpos como teas encendidas
que una llama particular inicia.
Fue el apocalipsis;después una larga sombra.
Más tarde, una nueva llama
que consumió algún libro.
Que no quede en los jardines
más que la conciencia, errante sin cuerpo,
maldita del tirano.

ESTACIÓN BELGRANO R (2008)

Vinieron amasando Pampa desde el río
terrones sombríos y murallas de hiedra.
Les salían al paso de los landós
largas sombras.

Y así fue como hicieron caminatas sin cuento
construyendo el laberinto
para que lo habitemos
y desentrañe su clave en el jardín que amo.

En los patios aquellos no animó ningún tango
el reflejo verde de la Avenida Forest
ni la última y enorme luz del día
que se colaba rasgando al demonio de la sombra.

Como un niño que corre a través de bulevares.

VÍA LÁCTEA (2008)
A Ara, que tomaba Speed con la boca semi-cerrada, porque le faltaba un diente de adelante.
Cuando
a medianoche y sólo si regresás
aún no es de día,
me parezca oirte murmurar un nombre,
por favor decime cuál es ese nombre.
Con solo su sonido me basta
algo para reordenar el mundo.

Cuando
a mediodía intentés recordar el eco
y la noche haya llevado su sustancia,
una mujer vestida con una falda de vinilo verde
te invitará al final de una escalera
a que la abraces.

Contador

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