"¿Cómo era la plañidera? Era como una melodía... un canto de ballena... vibraciones de subatómicas que en pocos días barrieron con todo rastro de vida sobre la tierra.
Uno escuchaba el tono... y veía a las ciudades venirse abajo."
(...)
"Los pocos que sobrevivimos lo hicimos al amparo de los campos de trigo o de algodón, a los que la plañidera no tocó... no sé, tal vez fue la porosa risa del trigal la que contuvo al tono... escuchamos ahora las espigas en el viento, el viento que sopla... reímos y estamos en paz."
(...)
— Déjame vivir en mi realidad —dijo Juan — Es imposible recordar cómo era el mundo antes de la plañidera. ¿Sabías, que la compañía que la creó la pensó para que fuese usada en demoliciones? Uso civil. Qué mierda.
— No pueden vivir siempre en los campos de trigo... algún día , podrían incendiarse los cultivos... y la plañidera estaría frente a las puertas del asentamiento.
—Déjame vivir en mi asentamiento. Basta.
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